La red de pinturerías más importante de Uruguay llevaba muchos años sin renovar su identidad. El objetivo de este proyecto fue mantener la esencia y el reconocimiento de su marca gráfica, pero que en el cambio se visualizara más moderna y actual. Bajo estos lineamientos, mantuvimos la imagen del sombrero del arlequín (figura tradicionalmente reconocida de la compañía) y el azul marino en su logotipo, realizando una síntesis formal y cromática que le brindan a la marca una mayor pregnancia.